Cada mes, los trabajadores por cuenta ajena reciben una nómina como pago por los servicios prestados a su empresa, según estipula su contrato laboral. Por tanto, debe reflejar los devengos del salario de cada empleado, la base de cotización, así como las deducciones fiscales y a la Seguridad Social que se descuentan del sueldo. En consecuencia, es importante comprobar que los datos que figuran en la nómina son correctos, y en caso de detectar algún error, corregirlo a tiempo para evitar problemas en un futuro.
Partes que integran una nómina: devengos y deducciones
En primer lugar, entendamos las partes que integran una nómina. Obviamente, para que el documento sea correcto debe contener los datos que identifiquen a la empresa, su número de cotización y el lugar donde se encuentra el centro de trabajo. Además, en lo referente al trabajador, debe contener su NIF, el número de la Seguridad Social, así como el Grupo profesional y de cotización, por el que está contratado en la empresa.
Por otro lado, una vez que comprobemos que dichos datos básicos son correctos, debemos poner atención tanto en los devengos como en las deducciones que nos van a aplicar en la retribución salarial.
Devengos de una nómina
Los ingresos brutos, también llamados devengos, son las percepciones salariales y no salariales que recibe un trabajador en su nómina. Se dividen de la siguiente forma:
- Salario base que viene fijado por el convenio laboral.
- Percepciones no salariales:
- Plus de transporte.
- Dietas.
- Seguros médicos.
- Indemnizaciones.
- Pagas extra prorrateadas.
- Complementos salariales:
- Por convenio.
- Por antigüedad.
- Incentivos comerciales.
- Otros pluses.
Deducciones que se aplican en la nómina
En la nómina de cada trabajador se aplican una serie de deducciones. Es posible que nos encontremos con descuentos monetarios en caso de que se haya prestado o anticipado dinero al trabajador u otras obligaciones que el mismo haya adquirido, en ese aspecto, con su empresa de forma voluntaria. No obstante, las principales están destinadas a la Seguridad Social y a Hacienda, en las que se descuentan porcentajes con respecto a la base de cotización:
- Contingencias comunes: 4,7%
- Por contingencias profesionales: 1,55%.
- Formación profesional: 0,1%
- Retención de IRPF: el porcentaje destinado a Hacienda no es fijo, ya que dependerá del devengado anual del trabajador y de su situación familiar. Por este motivo, el empleado debe rellenar y entregar a su empresa el Modelo 145.
La importancia de conocer que las bases de cotización son correctas
Para finalizar, el trabajador debe comprobar que las base por la que cotiza es la correcta, según el trabajo que desempeña y la categoría profesional por la que está contratado. Recordamos que las bases de cotización son las que determinarán el importe de la futura pensión de jubilación o la cuantía de la prestación contributiva por desempleo. Por consiguiente, es conveniente revisar que sean las adecuadas. De no ser así, hay que comunicarlo a la empresa para que las corrija, con el fin de evitar futuras sorpresas.
Si quieres conocer más información sobre otros trámites y gestiones, te recomendamos que visites nuestra plataforma web de noticias de la comunidad autónoma de Andalucía. Síguenos a diario para estar informado.