La prestación contributiva por desempleo es una ayuda del SEPE destinada a las personas que queriendo y pudiendo trabajar pierden “su empleo de forma temporal o definitiva o vean reducida temporalmente su jornada ordinaria de trabajo entre un mínimo de un 10% y un 70%”. En 2023, el Gobierno ha introducido cambios en la normativa para que las personas que tengan derecho a cobrar el paro, puedan recibir 100€ más al mes.
Qué personas se pueden beneficiar de la prestación por desempleo
Esta ayuda del Servicio Público de Empleo Estatal está dirigida principalmente a las personas trabajadoras por cuenta ajena que se queden en paro y que hayan cotizado en sus nóminas por la contingencia de desempleo en el Régimen General. También, aquellos incluidos en Regímenes Especiales, como es el caso de la Minería del Carbón, los Trabajadores del Mar, los pertenecientes al Sistema Especial Agrario o al de los Empleados de Hogar. Además, hay que cumplir estos requisitos para poder beneficiarse:
- No tener cumplida la edad legal de jubilación.
- Estar en situación legal de desempleo y suscribir un compromiso de actividad.
- Permanecer inscrito como demandante durante todo el periodo que se percibe la prestación.
- Haber cotizado por desempleo al menos 360 días en los 6 años anteriores a la solicitud.
- No realizar ninguna actividad laboral por cuenta ajena o propia.
- No cobrar una pensión de la Seguridad Social incompatible con el trabajo.
Para poder solicitar una prestación contributiva por desempleo hay que haber cotizado al menos durante 360 días. Si no es así, el trabajador tendrá derecho a cobrar cualquiera de los subsidios que ofrece el SEPE por insuficiencia de cotización, cuya cuantía es inferior y difiere también en relación a las condiciones y requisitos.
¿En qué consiste esta subida de 100€ en la mensualidad del cobro del paro?
Tal y como indica la página web del SEPE “la cuantía de la prestación contributiva depende de las bases de cotización a la Seguridad Social por contingencias profesionales, durante los 180 últimos días cotizados, sin tener en cuenta las horas extraordinarias”. De esta forma, el importe diario que percibe la persona beneficiaria es del 70% los primeros 180 días. Sin embargo, a partir del día 181 y hasta que se agote el derecho, se recibe el 60% de la base reguladora. Esto supone un incremento de 100€ que beneficia a más de 300.000 parados, ya que anteriormente, la normativa establecía un porcentaje de solo el 50%.
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