¿Jubilación activa o jubilación flexible? Aunque se trata de conceptos muy parecidos, presentan diferencias. En ambos casos, la Seguridad Social nos dice que son dos opciones que están a disposición de las personas que alcanzan la edad ordinaria de jubilación, pero que deciden simultanear su condición de pensionista con el inicio de una actividad laboral. Si no conoces en qué consisten ambas alternativas, te lo explicamos, para que sepas elegir la que más te conviene.
Conoce las principales diferencias entre jubilación activa y jubilación flexible
Aunque depende mucho de la actividad profesional que se haya venido desarrollando a lo largo de la vida, cada vez más personas prefieren alargar su actividad laboral a pesar de haber alcanzado la edad de jubilación. Es una buena elección si se quiere conseguir un dinero extra que permita compatibilizar la pensión con los ingresos obtenidos por el trabajo. En estos casos, la Seguridad Social ofrece la jubilación activa y la jubilación flexible. Veamos en qué consiste cada una.
Características de la jubilación activa
La jubilación activa, también denominada como “envejecimiento activo”, da la posibilidad a la persona interesada, tal y como explica la Seguridad Social, a: “compatibilizar la pensión de jubilación por cuenta propia o por cuenta ajena en el ámbito del sector privado, a tiempo completo o parcial”. Además, “siempre que la cuantía de la pensión alcance el 100 % de la base reguladora”.
Adicionalmente, si se escoge esta opción, la cuantía que queda de la pensión compatible con el trabajo que se vaya a realizar va a ser del 50%. Solo podría ser del 100% en el caso de que la actividad se realice por cuenta propia y se tenga contratado a un empleado por cuenta ajena. Asimismo, para acogerse a esta opción es necesario que el acceso a la jubilación se haya producido un año después de haber cumplido la edad ordinaria de jubilación.
La jubilación flexible: otra opción a considerar
Otra opción que ofrece la Seguridad Social a la persona que quiera completar su pensión con unos ingresos extra, es la jubilación flexible. En este caso, se “posibilita compatibilizar la jubilación, una vez causada la pensión, con un contrato por cuenta ajena a tiempo parcial con una reducción de jornada de entre el 25 y el 50 % de la jornada a tiempo completo de un trabajador comparable, reduciéndose el importe de la pensión en proporción inversa”.
Por otra parte, las cotizaciones adicionales que el trabajador consiga durante el periodo que dure la jubilación flexible, se tendrán en cuenta para la futura pensión de jubilación, es decir, cuando cese totalmente la actividad laboral.
En suma, una vez expuestas ambas modalidades de jubilación demorada, es tu decisión ver cuál es la que más te conviene dependiendo de tu perfil y necesidades personales o familiares. No obstante, si quieres conocer más información sobre pensiones u otras ayudas y prestaciones, te recomendamos que visites nuestro periódico digital especializado en noticias de Andalucía.