El oro ha ido incrementando su valor en los últimos años y ya supera los 3.000 dólares por onza. Cada vez hay más personas que desean adquirirlo en lingotes, monedas y onzas, y también mediante fondos especializados o ETF (Exchange Traded Funds). Sin embargo, no hay que olvidar que para comprar oro, se debe de tener en cuenta que este metal implica una serie de responsabilidades tributarias. Si quieres aprovechar su máxima rentabilidad, sigue leyendo este artículo:
Comprar oro: opciones y factores a evaluar
De acuerdo al Consejo Mundial del Oro, su demanda en 2024 alcanzó las 4.974 toneladas, con los bancos centrales manteniendo su posición de compradores netos por tercer año consecutivo, comprando más de 1.000 toneladas. Para muchos expertos, esto significa que mientras los bancos se mantengan activos, la inversión en oro será provechosa.
Según Renta 4 Banco, hay que vigilar que la inflación haga caer el valor de la moneda, evaluando factores como la inestabilidad social y política, que se refleja en la caída del mercado de valores o si los bancos centrales anuncian la impresión de más dinero.
Si quieres invertir en oro tangible, los expertos recomiendan depositarlo en entidades especializadas (no en tu casa). Además del formato físico, los ETF han ganado protagonismo. Estos fondos de inversión están relacionados con el precio del metal, facilitando la compra y venta. También hay fondos que invierten en empresas vinculadas directa o indirectamente en oro, aunque esa inversión depende de factores externos que pueden hacer que su valor fluctúe.
¿Cuáles son los impuestos por comprarlo?
Invertir en este metal implica pagar una serie de impuestos. Estos van acorde a la Ley del IVA, en un Régimen Especial del oro de inversión. Hacienda señala, que se considera oro de inversión:
- Los lingotes o láminas de oro de ley igual o superior a 995 milésimas y cuyo peso se ajuste a lo dispuesto en el apartado noveno del anexo de la Ley.
- Las monedas de oro que sean de ley igual o superior a 900 milésimas, acuñadas con posterioridad al año 1800, que sean o hayan sido moneda de curso legal en su país de origen y que sean comercializadas habitualmente por un precio no superior en un 80% al valor de mercado del oro contenido en ellas
¿Dónde no se aplica esa exención?
La Agencia Tributaria especifica que dentro del Régimen especial del oro de inversión, salvo renuncia a la exención por parte del transmitente, se aplica una exención a estas operaciones:
- Las entregas, adquisiciones intracomunitarias e importaciones de oro de inversión. Se incluyen, en concepto de entregas, los préstamos y las operaciones de permuta financiera y operaciones derivadas de contratos de futuro o a plazo (cuando tengan por objeto oro de inversión e impliquen la transmisión del poder de disposición).
¿Qué cuotas al comprar oro son deducibles?
Las operaciones con oro de inversión son un sector diferenciado de la actividad del empresario o profesional que las realice, por lo que tienen su propio régimen de deducciones. Hacienda establece que serán deducibles:
- Empresarios o profesionales que hayan producido ese metal o lo hayan obtenido mediante transformación.
- Las cuotas soportadas por la adquisición interna de ese metal si su proveedor renuncia a la exención. También, si en el momento de su adquisición no reunía los requisitos para ser considerado oro de inversión, habiendo sido transformado en oro de inversión por quien efectúa la entrega exenta o por su cuenta.
- Las cuotas sostenidas por los servicios de cambio de forma, peso o ley de ese oro.
Si estás pensando comprar oro, además de evaluar todas las opciones y tener en cuenta los riesgos, ten en cuenta los impuestos. Para seguir leyendo estas noticias y aprovechar nuevas inversiones, puedes visitarnos en nuestra sección de trámites.