Desde 2013 el certificado energético es obligatorio para vender o alquilar vivienda en España. A partir de 2030 se exigirá, como mínimo, la clase E.
El certificado energético es un requisito para toda vivienda, nueva o usada. ¿Vas a vender o alquilar tu casa? Entonces necesitas este documento y su registro oficial. No tenerlo o publicitar el inmueble sin mencionar su calificación puede salir caro. Vamos al detalle, para que no te pille el toro. Las sanciones van de 300 a 6.000 euros según la gravedad y hay supuestos de exención.
Quién debe tramitar el certificado energético y por qué es imprescindible
El responsable es siempre el propietario. Debe obtener el certificado, registrarlo cuando proceda, renovarlo si caduca y facilitarlo al comprador o al inquilino cuando se formalice la operación. Además, en los anuncios de venta o alquiler debe figurar la calificación; de lo contrario, puede haber multa. En consecuencia, mantener el documento al día evita demoras y sanciones innecesarias.
La normativa europea endurece los requisitos para que la sostenibilidad sea parte del mercado inmobiliario. A partir de 2030, para vender o alquilar una vivienda se exigirá al menos la clase E en la escala que va de la A (más eficiente) a la G (menos eficiente). Esto quiere decir que la calificación energética se convierte en un elemento decisivo en cualquier transacción.
Cómo solicitar y registrar el certificado energético paso a paso online y presencial
En la práctica, el trámite pasa por tres hitos: obtener el documento, registrarlo en el sistema correspondiente y renovarlo cuando caduque. También debe exhibirse la etiqueta de eficiencia energética asociada al inmueble. ¿Te falta por renovarlo? No lo demores: la falta de registro o de actualización puede conllevar sanciones dentro del tramo de infracciones graves.
Tipos de infracciones con sanciones económicas y ejemplos frecuentes a evitar
Las faltas se clasifican en leves, graves y muy graves. El importe aumenta según la conducta. Por tanto, conviene conocer los supuestos más habituales para no incurrir en ellos. A continuación, una tabla-resumen con rangos y ejemplos:
Tipo de infracción | Rango de multa | Ejemplos frecuentes |
---|---|---|
Leves | 300–600 € | Anunciar venta o alquiler sin mencionar la calificación; no renovar un certificado caducado; no exhibir la etiqueta de eficiencia. |
Graves | 601–1.000 € | No registrar el certificado; mostrar una calificación que no se corresponde con la vivienda; vender o alquilar sin ofrecer el documento. |
Muy graves | 1.001–6.000 € | Falsear información en la expedición o el registro; publicitar una calificación sin disponer de un certificado válido. |
Tras la tabla, una idea clave: cuanto más se intenta ocultar o manipular la información, mayor es la sanción. En resumen, transparencia y cumplimiento evitan problemas.
Quiénes están exentos de certificado energético y en qué situaciones concretas
Existen excepciones que liberan de la obligación y de las multas asociadas. ¿Tu inmueble encaja en alguno de estos casos?
- Edificios religiosos y monumentos.
- Viviendas que no se alquilen más de 16 semanas al año.
- Edificios agrícolas e industriales.
- Inmuebles demolidos o de carácter provisional.
Si estás en uno de estos supuestos, no tendrás que obtener ni registrar el documento. No obstante, si la situación cambia (por ejemplo, si decides alquilar tu vivienda por más tiempo), deberás adaptarte a las obligaciones y evitar sanciones. Permanece al tanto sobre otras normativas visitando la sección de trámites y gestiones de nuestro periódico digital.