Miles de contribuyentes comenzarán a recibir los temidos requerimientos de Hacienda a partir de septiembre

A partir de septiembre, la Agencia Tributaria empezará a enviar notificaciones por discrepancias en la declaración del IRPF presentada este año. Los técnicos de Hacienda señalan a qué perfiles de autónomos podrían afectar y por qué.

Miles de contribuyentes, especialmente autónomos, pueden recibir a la vuelta del verano un requerimiento para justificar o subsanar errores en su Renta. La campaña terminó el 30 de junio, pero las comprobaciones llegan después: primero se priorizan devoluciones sin diferencias y, desde septiembre, comienzan los avisos que pueden prolongarse hasta diciembre o, en casos complejos, avanzar a 2026.

Quiénes pueden recibir requerimientos de Hacienda por discrepancias en la Renta

Tras los primeros cruces de julio y el parón de agosto, lo habitual es que lleguen notificaciones a quienes presenten diferencias entre lo declarado y lo que Hacienda conoce por otras fuentes. ¿Te ves reflejado en alguno de estos supuestos?

  • Ingresos no declarados o solo parcialmente reflejados.
  • Gastos deducidos sin relación directa con la actividad.
  • Descuadres con modelos trimestrales 130, 131 y 303.
  • Ayudas, subvenciones o prestaciones no incluidas.
  • Reducciones o beneficios fiscales aplicados de forma incorrecta.
  • Desajustes patrimoniales y signos externos que no cuadran.

En la práctica, pueden aparecer facturas emitidas que faltan, rentas obtenidas en plataformas digitales o ingresos detectados por la banca (por ejemplo, cobros en TPV o en PayPal) que no figuran en la Renta. También pesan deducciones indebidas en vehículo, teléfono o internet, cuando se imputan al 100% pese a su uso mixto, así como errores en ayudas percibidas en 2024 o en reducciones como la de inicio de actividad.

Fechas clave y calendario previsto de comprobaciones tras la campaña del IRPF

Hasta septiembre, la prioridad ha sido devolver a quienes no presentan diferencias. Para el resto, los requerimientos se escalan desde el final del verano y pueden extenderse varios meses, con investigaciones más profundas a partir de enero si existen grandes desajustes. ¿Cuándo puede tocarte? Antes de nada, revisa este esquema de tiempos para que no te pille el toro:

Fase del procesoPeriodo orientativoQué sucede
Fin de campaña del IRPF30 de junioSe cierran presentaciones y empiezan las revisiones internas.
Primeros cruces de datosJulioAfloran diferencias básicas entre lo declarado y lo conocido por Hacienda.
Pausa administrativaAgostoSe priorizan devoluciones sin discrepancias; no suelen enviarse avisos.
Envío de requerimientosDesde septiembre a diciembreLlegan notificaciones para justificar o subsanar errores detectados.
Análisis en profundidadDesde enero, si procedeCasos con grandes desajustes pueden prolongarse hasta 2026.

Este calendario explica por qué muchas comunicaciones se concentran a partir de septiembre: es cuando, tras filtrar devoluciones, los técnicos activan los expedientes con diferencias.

Documentación y pasos recomendados para justificar o subsanar posibles errores detectados

El objetivo del requerimiento es que acredites lo declarado o corrijas lo que falte. ¿Qué conviene preparar desde ya? En ingresos, reúne facturas emitidas, extractos bancarios y justificantes de cobros por TPV o plataformas. En gastos, ten a mano facturas y pruebas de vinculación con la actividad (vehículo, teléfono o internet cuando procede). Para descuadres, contrasta la Renta con los modelos 130, 131, 303 y el 390.

Si recibes una notificación por ayudas o prestaciones, revisa las percibidas en 2024 y comprueba si las incorporaste. En reducciones, valida plazos, como la de inicio de actividad, y el cálculo del 5% en estimación directa simplificada. Y, ante signos externos de riqueza que no casan con tus números, documenta el origen de fondos para evitar malentendidos.

El propio aviso indicará qué debes aportar y cómo hacerlo. Por tanto, responde en plazo, ordena la documentación y, si detectas un error, subsánalo cuanto antes. A veces una aclaración rápida evita una regularización mayor. De hecho, cruzar tus libros con los modelos informativos de clientes y proveedores puede ahorrarte más de un susto. Conoce más noticias sobre trámites fiscales y administrativos visitando nuestro periódico digital.

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