El contrato fijo discontinuo se ha convertido en una de las grandes alternativas para empresas que requieren personal en momentos específicos del año, ya sea por picos estacionales o actividades puntuales. Con la reforma laboral de 2022, su uso ha ganado relevancia, ofreciendo más seguridad al trabajador y mayor flexibilidad al empleador.
En esencia, es un contrato indefinido, pero con periodos de inactividad en los que no se trabaja ni se cobra, aunque se conserva la antigüedad y se mantiene el derecho a ser llamado en la siguiente campaña o etapa productiva. ¿Te interesa saber más? A continuación, te explicamos cómo funciona, sus cambios tras la reforma y en qué difiere del contrato temporal.
Todo lo que debes saber del contrato fijo discontinuo tras la reforma laboral de 2022
Esta modalidad se aplica cuando la empresa no necesita al mismo empleado de forma continua, sino en épocas concretas y recurrentes. Según el artículo 16 del Estatuto de los Trabajadores, no es un contrato temporal: es indefinido, por lo que el trabajador pasa a formar parte de la plantilla fija, con sus mismos derechos de cotización y protección social.
La reforma laboral subraya la excepcionalidad de los contratos de duración determinada, de ahí que los fijos discontinuos se planteen como opción prioritaria. Por tanto, sectores como la agricultura, la hostelería o la educación suelen recurrir a este tipo de contrato, pues registran actividad estacional y necesitan cubrir puestos durante periodos concretos.
Principales diferencias entre el contrato fijo discontinuo y el contrato temporal
Aunque ambos pueden responder a necesidades puntuales, hay matices importantes:
Característica | Contrato Fijo Discontinuo | Contrato Temporal |
---|---|---|
Naturaleza | Indefinida (sin fecha de finalización) | Definida (fecha de fin por obra, servicio o circunstancia) |
Periodos de inactividad | Existe relación laboral, pero sin salario ni cotización | Cuando termina, el vínculo laboral se extingue |
Derecho al llamamiento | Sí, el trabajador debe ser requerido en cada nueva campaña | No existe obligación de volver a contratar |
Antigüedad | Se acumula toda la relación, incluyendo etapas inactivas | Se pierde al final de cada contrato |
Como ves, los fijos discontinuos cuentan con mayor protección, mientras que el contrato temporal se limita a circunstancias de la producción o sustituciones. ¡Ojo con confundirlos! Un mal uso puede considerarse fraude de ley y derivar en sanciones.
Ventajas, inconvenientes y consejos para gestionar un contrato fijo discontinuo con éxito
- Ventajas: Flexibilidad para la empresa, mantenimiento de la plantilla especializada y derecho a antigüedad para el empleado.
- Inconvenientes: Ausencia de salario y cotización en periodos inactivos, así como la necesidad de coordinar el llamamiento a tiempo.
Para agilizar la gestión, conviene detallar por escrito la duración aproximada de la actividad y los periodos de descanso, fijar la forma de avisar al trabajador y revisar que se cumplen las normas laborales (salario mínimo, descansos y vacaciones). Además, si en alguna temporada no se llama a la persona, podría considerarse un despido improcedente.
El contrato fijo discontinuo busca equilibrar los picos de producción con la estabilidad laboral del trabajador. Antes de firmar, es importante aclarar la jornada, la forma de llamamiento y las posibles condiciones de finiquito. ¿Tienes dudas? Contactar con un experto en derecho laboral puede evitar incidencias y asegurar que la empresa cumpla sus obligaciones. También, puedes conocer más asuntos relacionados con otros documentos, trámites y gestiones administrativas visitando nuestra web especializada.