El fin del 2024 está al acecho. A esto, se acarrean las cuentas pendientes y decisiones fiscales que puedan afectar a la próxima declaración de la Renta. El día 31 de diciembre es el último para aplicar trucos legales que rebajen la cuota tributaria. Una de las medidas más recurrentes es abrir un plan de pensiones o aportar al que ya se tiene. Esta opción permite reducir la factura del IRPF. Esto es debido a que el dinero ahorrado en el año se descuenta de la base imponible en su totalidad. ¿Quieres saber más? Sigue leyendo:
Plan de pensiones y reducción de IRPF
La aportación máxima al plan de pensiones individual debe de ser la menor de estas dos cifras: el 30% de la suma de rendimientos netos del trabajo y de actividades económicas del ejercicio, o 1.500 euros anuales, de acuerdo a la legislación vigente. Asimismo, los expertos de Gestha (Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda), señalan que en 2024 continúa en 1.500 euros la aportación máxima al plan individual.
No obstante, explican que existe “la posibilidad de incrementar las aportaciones hasta en 8.500 euros más por aportaciones a planes empresariales. Habitualmente, en los últimos meses del año conviene hacer aportaciones a los planes de pensiones o a los de previsión asegurados, para lograr un ahorro fiscal en la declaración de la renta del próximo año».
Cabe mencionar que hasta el 2020 el límite de las aportaciones a los planes individuales con derecho a desgravación en el IRPF era de 8.000 euros. Posteriormente se redujo a 2.000 euros, lo que supuso una merma del 75%. Después, el recorte fue a más. En 2022 se volvieron a rebajar esos límites hasta los 1.500 euros, con lo que, estos límites bajaron en 6.500 euros en dos años.
Incrementación de la renta
Sin embargo, los técnicos de Gestha aseguran que el límite anterior se puede incrementar en 8.500 euros. Esto será siempre cuando “dicho aumento provenga de contribuciones empresariales al instrumento de previsión social, o de aportaciones del trabajador al mismo instrumento de previsión social por importe igual o inferior a unos límites basados en la contribución empresarial”. Además, este será diferente en “caso de planes sectoriales o planes de pensiones de empleo simplificados”.
Así, al incrementarse la renta declarada, un número considerable de personas puede favorecerse de esta desgravación. De esta forma, entre el 41%-44% de los declarantes que ingresan más de 60.000 euros se acogen a este beneficio. Este puede representar un ahorro del 47% de la aportación al plan a las personas con ingresos que superen los 300.000 euros al restar de la base imponible y disminuir la progresividad de los ingresos ordinarios.
¿Cómo se puede aprovechar la reducción del 40%?
Según detalla la Organización de Consumidores (OCU), hasta el 1 de enero de 2007 el rescate en forma de capital tenía una reducción fiscal del 40%. Este beneficio desapareció para las aportaciones posteriores al 1 de enero de 2007 aunque se mantiene para las anteriores. Esta medida se aplica siempre que el plan se cobre en forma de capital en el ejercicio en que tenga lugar la contingencia que da pie al cobro.
Por lo tanto, quienes no quieran perder el derecho a aplicar la ventaja fiscal de la reducción del 40% por las aportaciones anteriores a 2007 tendrán que solicitar el cobro antes de que acabe el 2024. De la misma forma, los beneficiarios de un plan por fallecimiento del partícipe, si la defunción se produjo en 2022, tendrán hasta el 31 de diciembre de este año para recuperar el plan en forma de capital. Para no perderte actualizaciones sobre estas noticias, puedes visitar la sección de trámites.