Jubilación anticipada para mujeres: la reforma urgente del sistema que se reclama desde los sindicatos

La propuesta busca corregir la brecha en las pensiones y adecuar la jubilación anticipada a realidades laborales feminizadas. El dato clave: la pensión media de ellas es un 30,33% inferior.

La Unión Sindical Obrera (USO) plantea reestructurar la jubilación anticipada incorporando la perspectiva de género. El objetivo es claro: que el acceso a la prestación sea realmente equitativo y no penalice trayectorias marcadas por cuidados, parcialidad y empleos feminizados.

Por qué la jubilación anticipada necesita una perspectiva de género real

La igualdad formal ha avanzado, pero persisten obstáculos que se notan en la nómina de la jubilación. ¿El motivo? Carreras interrumpidas por cuidados, trabajos a tiempo parcial y sectores feminizados con mayor precariedad. Dicho pronto y claro: las mujeres cotizan menos y durante menos tiempo, y eso se traduce en una pensión inferior.

Para dimensionar el problema conviene mirar los números. En mayo de 2025, la pensión media de jubilación de las mujeres fue sensiblemente menor a la de los hombres. La brecha del 30,33% lo dice todo.

ColectivoPensión media de jubilación (mayo 2025)
Mujeres1.199,87 €
Hombres1.722,28 €
Diferencia522 €

Estos datos evidencian una desigualdad que no es menor. ¿Se puede revertir? La respuesta pasa por cambios normativos y también culturales.

Quiénes serían las principales beneficiarias y cuál es el problema actual

Las medidas reclamadas buscan llegar a quienes más sufren el desgaste y la discontinuidad laboral: empleadas del hogar, cuidadoras o camareras de piso, entre otras. Son trabajos con elevada carga física y emocional, pero poco reconocidos en el sistema. De ahí que la jubilación anticipada, tal y como está, no siempre refleje la realidad de esas carreras.

Medidas propuestas para la jubilación anticipada con enfoque de género

La necesidad de cambio se acompaña de un paquete de actuaciones. ¿Qué se propone y por qué importa al solicitar la prestación?

  • Integrar de forma transversal la perspectiva de género en la normativa laboral, la prevención de riesgos y la Seguridad Social, para que la jubilación anticipada no reproduzca desigualdades.
  • Revisar los criterios de penosidad, peligrosidad, insalubridad y toxicidad con enfoque de género, atendiendo las condiciones específicas de los empleos feminizados.
  • Valorar coeficientes reductores para sectores con alta presencia femenina —como empleadas del hogar, cuidadoras y camareras de piso— por el desgaste físico y emocional que conllevan.
  • Actualizar el listado de enfermedades profesionales desde una mirada de género e incluir, entre otras, trastornos musculoesqueléticos, riesgos psicosociales y cáncer de mama y de ovario.
  • Reformar el sistema de pensiones con enfoque de género, desde el cálculo de las prestaciones hasta las políticas de jubilación; además, combatir la brecha salarial, la segregación horizontal y el impacto de carreras discontinuas por cuidados.
  • Garantizar protección a trabajadoras autónomas víctimas de violencia, asegurando su acceso a incapacidad temporal o jubilación anticipada sin discriminación y evitando que el sistema perpetúe su vulnerabilidad.
  • Impulsar la negociación colectiva con presencia paritaria y formación en igualdad, reforzando la prevención de riesgos, la salud laboral y la eliminación de brechas salariales.

En conjunto, estas medidas buscan que la jubilación anticipada responda a vidas laborales reales, no a trayectorias ideales que rara vez coinciden con la experiencia de muchas mujeres.

Qué organismos públicos deben coordinarse

La coordinación es clave. La Seguridad Social y el Instituto de las Mujeres deben alinear criterios, mientras las mesas de negociación colectiva incorporan la perspectiva de género para que el cambio baje al convenio y al puesto de trabajo. ¿Por dónde empezar? Por reconocer el valor social de los cuidados y trasladarlo al diseño de las prestaciones.

La conclusión es nítida: para cerrar la brecha no bastan retoques. Hacen falta reformas y un cambio de mirada que ponga en valor el trabajo de las mujeres. USO mantiene su apuesta por integrar este enfoque en los derechos laborales y reclama a las autoridades sentar las bases para reducir desigualdades estructurales y garantizar una jubilación justa. Síguenos para conocer más noticias del mundo laboral, actualidad, trámites y prestaciones.

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