El último recuento de la Seguridad Social muestra que las pensiones de incapacidad permanente son de las más frecuentes dentro del sistema contributivo, superadas solo por las de jubilación y viudedad. Sin embargo, no todas las enfermedades ocasionan el mismo impacto en el trabajador. ¿Te interesa saber cuáles suelen tener más posibilidades de aprobación? Un bufete especializado ha elaborado un listado con hasta 70 dolencias que, en su experiencia, han resultado determinantes en la concesión de esta prestación.
La clave radica en el grado de afectación que provoca la enfermedad, por lo que no existe ninguna garantía absoluta de acceder a la pensión solo por el diagnóstico. De hecho, la propia Seguridad Social insiste en que cada caso se estudia de forma individual, valorando tanto la limitación física o psíquica como la posibilidad de recuperación o mejoría. Aun así, el informe en cuestión recopila aquellas patologías que, estadísticamente, presentan un mayor número de resoluciones favorables.
Por qué estas enfermedades son decisivas para la concesión de la incapacidad permanente por parte de la Seguridad Social
Según las explicaciones de Campmany Abogados, la severidad de ciertas dolencias, sumada a la posible concurrencia de otras enfermedades, puede resultar decisiva al evaluar la capacidad laboral del solicitante. Para ilustrar esta realidad, se ofrece un listado de diagnósticos que, en conjunto, han acumulado un mayor porcentaje de aprobaciones. Por consiguiente, se entiende que el riesgo de sufrir recaídas o secuelas en estas patologías es más alto, dejando al trabajador con importantes limitaciones para desarrollar su empleo habitual o cualquier otro.
¿Quién puede solicitar la incapacidad permanente? Toda persona que evidencie una merma notable en sus facultades para desempeñar un trabajo, ya sea física o mental, siempre y cuando cuente con un historial clínico que justifique los daños irreversibles o de larga duración. No obstante, cada caso se estudia de manera individual, por lo que el mero hecho de figurar en esta lista no implica una concesión automática.
Listado de enfermedades con más posibilidades de obtener una incapacidad permanente
Este recuento no lo establece directamente la Seguridad Social, sino que recoge la experiencia práctica de numerosos casos gestionados por expertos en incapacidades. De ahí que se insista en que el dictamen final se base en los informes médicos concretos y en la repercusión real que provoca la patología. Conviene destacar que el informe agrupa las 70 enfermedades en distintas secciones médicas, tales como:
- Alergología:
- Dermatitis.
- Aparato digestivo:
- Colitis ulcerosa.
- Enfermedad de Crohn.
- Obesidad mórbida.
- Pancreatitis crónica.
- Cardiología:
- Arterioesclerosis.
- Cardiopatías.
- Miocardiopatías.
- Enfermedades cardiovasculares.
- Aneurisma.
- Arteriopatías.
- Fibrilación auricular.
- Hipertensión pulmonar.
- Infartos agudos de miocardio.
- Insuficiencia mitral.
- Síndrome Wolf-Parkinson-White.
- Taquicardias.
- Tetralogía de Fallot.
- Enfermedades psíquicas:
- Adicción a las drogas, ludopatía o alcoholismo.
- Agorafobia.
- Depresión.
- Esquizofrenia.
- Límite de personalidad o por estrés postraumático.
- Síndrome Burnout.
- Trastornos de ansiedad.
- Trastorno bipolar.
- Trastorno obsesivo compulsivo.
- Medicina interna:
- Fibromialgia.
- Lupus eritematoso sistémico.
- Sensibilidad química.
- Síndrome de fatiga crónica.
- Nefrología:
- Insuficiencia renal crónica.
- Trasplante de riñón.
- Neumología:
- Apnea del sueño.
- Asma profesional u ocupación.
- Enfermedades respiratorias provocadas por amianto.
- Enfisemas.
- EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).
- Sarcoidosis.
- Neurología:
- Alzheimer.
- Charcot-Marie-Tooth.
- Demencia.
- Esclerosis múltiple.
- Ictus.
- Miastenia gravis.
- Migrañas.
- Neuropatía periférica.
- Parkinson.
- Síndromes Arnold Chiari, de Lambert-Eaton y Post Polio.
- Traumatismos craneoencefálicos.
- Oftalmología:
- Desprendimiento de retina.
- Glaucoma.
- Neuropatía óptica.
- Pérdida de visión.
- Uveítis.
- Oncología:
- Cáncer de mama.
- Cáncer de pulmón.
- Cáncer de recto.
- Otorrinolaringología:
- Hipoacusia.
- Síndrome de Ménière.
- Reumatología:
- Artritis reumatoide o psoriásica.
- Enfermedad de Behcet.
- Espondilitis anquilosante.
- Fatiga crónica.
- Fibromialgia.
- Traumatología:
- Enfermedad de Perthes.
- Gonartrosis.
- Hernia cervical.
- Lumbalgia.
- Patologías graves de la mano, cadera, hombro, codos o pies.
- Síndrome cola de caballo.
La Seguridad Social no maneja un listado oficial que otorgue la incapacidad permanente de forma inmediata por padecer una u otra enfermedad. Lo verdaderamente determinante es el grado de limitación funcional que acarree cada caso. Por tanto, se recomienda acudir a especialistas médicos y, si es necesario, a profesionales en Derecho Laboral para evaluar la viabilidad de la solicitud y preparar la documentación clínica oportuna. Te recomendamos que consultes la sección de prestaciones para estar informado de las últimas novedades.