El debate en torno a la sostenibilidad de las pensiones vuelve a encenderse: cada vez hay más pensionistas y menos trabajadores activos para sostener los pagos. ¿Te has planteado lo que ocurrirá cuando los llamados ‘babyboomers’ se jubilen en masa? Muchos expertos advierten de que nos encontramos ante un problema estructural que no deja de posponerse.
Las principales razones que convierten el actual sistema de pensiones en una gran incógnita
Hay quien asegura que el sistema de pensiones es una “bomba de relojería”. En los años setenta, había seis trabajadores por cada pensionista; ahora la cifra apenas supera los dos. Esto significa que las aportaciones realizadas no se corresponden con lo que, en realidad, se percibe al jubilarse. Para colmo, los salarios de hoy suelen ser inferiores a los de hace décadas, pero las pensiones han crecido hasta cifras que rondan los 3.200 euros brutos en los casos máximos.
A modo de ejemplo, se calcula que cobrar la pensión máxima durante unos 25 años puede llegar a superar el millón de euros. Sin embargo, incluso cotizando siempre al máximo, apenas se habrían aportado 600.000 euros en total. ¿La diferencia? La asumen los jóvenes, mes a mes, con sus cotizaciones.
Por qué la generación ‘babyboomer’ recibe más de lo que realmente cotizó durante años
Los nacidos en las décadas de los cincuenta y sesenta son los grandes beneficiarios del sistema. Al crearse el modelo actual, las expectativas de vida y la cantidad de contribuyentes por jubilado eran muy distintas. Por tanto, quienes se retiran ahora suelen disfrutar de mejores prestaciones en comparación con las cuotas que pagaron.
Este desfase se ha acentuado debido a que estos pensionistas, en muchos casos, forman parte de la generación más privilegiada de Europa en términos de cuantía de jubilación. Mientras tanto, la llamada “generación estafada” (1985-1999) se enfrenta a salarios más bajos e inestabilidad laboral.
Los graves efectos que sufrirá la generación más joven si todo sigue igual
De no reformarse el sistema, muchos temen que estas cohortes más jóvenes no lleguen a cobrar jamás una pensión completa. Se habla incluso de retrasar la edad de jubilación por encima de los 75 años, algo que puede considerarse impensable para quienes estén inmersos en trabajos físicos o precarios. Para entender la evolución del número de trabajadores por pensionista, aquí se presenta una tabla comparativa:
Año | Trabajadores por pensionista | Observación |
---|---|---|
1970 | 6 | Modelo de pensiones inicial |
2023 | 2 | Avance del envejecimiento |
2040* | < 2 | Previsión de colapso inminente |
*Previsión según estimaciones demográficas actuales.
Las posibles medidas urgentes que podrían evitar el colapso económico de las jubilaciones
Antes de que estalle la “bomba”, hay distintas alternativas para paliar la situación. Entre las más destacadas:
- Realizar aportaciones complementarias o planes de ahorro privados.
- Fomentar la contratación de jóvenes con sueldos dignos que aumenten la base de cotización.
- Revisar la edad de jubilación y las condiciones de acceso con criterios de sostenibilidad.
- Implantar fórmulas que equilibren los ingresos y gastos en el corto y largo plazo.
Ninguna de estas medidas será efectiva por sí sola si no se afronta el problema desde un enfoque integral y con la implicación de todas las partes. Como apunta más de un experto: “Ojo con el retraso de las reformas, porque cada día que pasa, el agujero es un poco más grande”.
El futuro de miles de pensionistas, presentes y futuros, pasa por reconocer que el sistema no puede sostenerse tal y como está concebido. A pesar de que los jubilados actuales reciben pensiones generosas, la realidad demográfica y laboral de los últimos años exige un replanteamiento urgente. De lo contrario, la carga podría volverse insostenible para las nuevas generaciones. En caso de dudas, conviene consultar fuentes oficiales y sopesar posibles vías de ahorro privado que refuercen la seguridad en los años de retiro.