Una trabajadora de farmacia fue despedida por carecer de titulación tras casi tres décadas en el mismo puesto. Tras un largo periplo judicial, la resolución final en 2025 le da la razón y recuerda a los empleadores su deber de verificar diplomas.
El caso arranca en 1998, cuando la empleada comenzó a trabajar como técnica en una farmacia del sur de Francia. Hubo cambios de propietarios, el contrato se transfirió en 2015 y, tras una inspección en 2017 que pidió los diplomas, llegó el despido por falta grave a inicios de 2018. Después de idas y venidas judiciales, el máximo tribunal del país revocó en 2025 la decisión del Tribunal de Apelación y respaldó a la trabajadora, imponiendo además 3.000 euros en costas al empleador.
El despido por no tener titulación tras 27 años trabajados, clave judicial
La inspección de trabajo de finales de 2017 solicitó los diplomas del personal cualificado y no halló el de la empleada. Ella estaba de baja médica y la empresa le remitió dos cartas pidiendo el documento. Ante la falta de respuesta, se acordó suspensión cautelar y, en 2018, cese por falta grave al considerar que ocupaba un puesto regulado sin título, exponiendo a la farmacia a sanciones.
La extrabajadora defendió que nunca ocultó su situación y que siempre trabajó bajo supervisión. ¿Quién debía revisar los registros al comprar el negocio? Según relató, el nuevo gerente no lo hizo, pese a que la relación laboral continuó durante años.
Fechas, fallos y cuantías que marcan el recorrido de la demanda
A continuación se resume la cronología para entender los giros del procedimiento. ¿Podría pasarte algo similar en tu empresa o en la que trabajas? Conviene fijarse en cada hito.
Año | Hecho clave | Resultado principal |
---|---|---|
1998 | Inicio de la relación laboral como técnica de farmacia | Contrato activo durante 27 años |
2015 | Cambio de titulares y traspaso del contrato | Continúa la relación con nuevos gerentes |
2017 | Inspección de trabajo solicita diplomas | No aparece el título de la empleada |
2018 | Despido por falta grave | Empresa alega desempeño en puesto regulado sin diploma |
2021 | Primer fallo judicial | Victoria de la trabajadora e indemnización de 34.800 € |
2023 | Apelación | Revocación: la empresa gana y se desestima la demanda |
2025 | Decisión del máximo tribunal | Se revoca la apelación; 3.000 € en costas al empleador |
Este desenlace recalca una idea: si la empresa ha mantenido la relación laboral sin verificar la cualificación durante años, no puede ampararse en esa omisión para justificar un despido disciplinario.
Quién asume la responsabilidad de verificar diplomas y cómo afecta
La clave está en la diligencia empresarial. El tribunal concluye que, tras prolongar el vínculo sin comprobar la formación, el empleador no puede invocar su propia falta de control para despedir por causa grave. En otras palabras, el deber de verificación es previo y constante, especialmente en actividades reguladas.
Además, el caso recuerda algo básico: ante inspecciones aleatorias, los documentos deben estar localizables y actualizados. La trabajadora, pese a carecer de diploma, llevaba años en el puesto y bajo supervisión; esa continuidad pesó en la balanza.
Qué deben hacer las empresas para evitar sanciones y pleitos laborales
Antes de la tabla anterior hemos visto que los tiempos importan. Ahora, ¿qué buenas prácticas conviene adoptar para no tropezar con la misma piedra? Toma nota: no es ninguna tontería.
- Verificar títulos antes de contratar y al asumir negocios; dejar constancia documental.
- Revisar periódicamente expedientes del personal en puestos regulados.
- Responder por escrito a inspecciones y requerimientos, guardando acuse.
- Establecer protocolos de sustitución y supervisión cuando falte una acreditación.
- Formar a gerencias entrantes sobre obligaciones y registros del personal.
En resumen, la sentencia no traslada toda la responsabilidad a la persona trabajadora; subraya que el control empresarial es ineludible. Por tanto, si se mantiene la relación sin comprobar la titulación, luego no vale alegar desconocimiento para cesar por falta grave.
Este caso, recogido por la prensa francesa, sirve de aviso: la prevención documental evita conflictos y costes. Y cuando hay dudas, conviene actuar con rapidez, dejar rastro escrito y respetar los procedimientos. Por consiguiente, lo prudente es verificar hoy lo que mañana puede convertirse en un problema. Conoce otras noticias relevantes relacionadas con el mundo laboral en nuestra sección de empleo.