El Departamento de Educación del Gobierno Vasco en Álava descubrió la presencia de material genético de un insecto en un menú de un centro escolar alavés. Ante este hallazgo, decidió imponerle a la empresa que suministraba los alimentos una multa de 40.000 euros. Después de un proceso judicial, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJV) dictó una resolución que demuestra que nunca llueve a gusto de todos. Para conocer más sobre esta sentencia, puedes seguir leyendo este artículo.
Una sanción del Departamento de Educación y la sentencia del tribunal
En la sanción del Departamento de Educación a esta empresa, citaba que dicho hallazgo “revestía una especial gravedad por su potencial transcendencia directa en la salud de los usuarios”, que en este caso eran menores de edad, y por las “posibles consecuencias” en su salud. En su recurso ante el TSJPV, la empresa admitió que en las muestras se encontró material genético de un insecto.
Sin embargo, rechazó que este incidente “tenga cabida dentro de la infracción prevista en el apartado 11 de la cláusula 13.1 del PCAP” -Pliego de Cláusulas Administrativas Particulares –. Este se refiere a la “inadecuada o deficiente calidad de los servicios con trascendencia directa para la salud”. No obstante, en su sentencia, la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia revocó la multa de 40.000 euros.
¿Cuáles son las razones que dio el tribunal?
El tribunal dispuso que la presencia de este insecto, perteneciente a la especie Plodia interpunctella, no se traduce automáticamente en una violación de las normas sobre calidad de los servicios. Por lo tanto, remarcó que no había evidencias que avalasen que esta situación hubiese puesto en peligro la salud de los menores.
Asimismo, el TSJPV estimó que las alegaciones del Departamento de Educación eran vagas y que no concretaban “cuáles fueron los incumplimientos ni cuándo se produjeron”, lo cual dificultaba el derecho de defensa de la empresa.
Cabe mencionar que el Departamento de Educación no aportó ningún informe que demostrara los efectos nocivos que la presencia del insecto podría tener sobre la salud de los niños. Mientras, la empresa sancionada sí entregó dos informes que indicaban que Plodia interpunctella es inocua para los seres humanos. Uno de estos, fue elaborado por el Departamento de Calidad de Biotecnal y otro por un profesor de Zoología de la Universidad de Valencia.
¿Cuáles son las sanciones por alimentos en mal estado?
Consumo especifica que las infracciones de la normativa de consumo serán sancionadas con una amonestación o con multas comprendidas entre los siguientes importes máximos y mínimos, según la gravedad de la infracción:
- Infracciones muy graves: 60.001 – 1.000.000 de euros.
- Infracciones graves: 5.001 – 60.000 euros.
- Infracciones leves: 200 – 5.000 euros.
Aun así, en este caso, el tribunal resolvió que no había pruebas que demostrasen que esa especie de insecto fuese nociva para la salud de los menores, por lo que absolvió a la empresa de una multa de 40.000 euros. Si quieres seguir leyendo noticias de sentencias, puedes visitar este portal digital.