Si la vida laboral se queda por debajo de quince años cotizados, no hay pensión contributiva, pero sí pensiones no contributivas y cuantías mínimas de 2025.
Muchos ciudadanos se preguntan qué pensión les quedará en la jubilación. Para acceder a la pensión contributiva de jubilación es obligatorio haber cotizado quince años. Por lo tanto, si te quedas en 10, 12, 13 o 14 años, no alcanzas el mínimo y no hay pensión contributiva. La alternativa son las pensiones no contributivas, que en 2025 ascienden a 7.905,80 euros al año, 564,70 euros al mes en 14 pagas, condicionadas al cumplimiento de los requisitos que marca la ley:
- Quince años cotizados, dos en los últimos quince.
- Estar en alta.
- Pedir la pensión en los tres meses antes o después del cese.
Además, la edad de jubilación va aumentando progresivamente hasta 2027: ese año quedará fijada en 67 años para quienes en 2025 no hayan cotizado, como mínimo, 38 años y tres meses, mientras que quienes sí alcancen ese periodo podrán jubilarse a los 65 años; el resto deberá esperar hasta los 66 años y ocho meses.
Cómo calcula la Seguridad Social la base reguladora y el porcentaje de pensión según años cotizados
Una vez se alcanzan los quince años cotizados, la pensión se calcula sobre una base reguladora. En 2025 se suman las bases de los últimos 25 años de cotización (300 meses), se dividen entre 350 y, salvo las de los dos últimos años, se actualizan según el IPC acumulado.
Esa base reguladora equivale al 100% de la pensión teórica. Con 15 años se cobra el 50%. Durante los primeros 49 meses extra se suma un 0,21% mensual y, desde el mes 50, un 0,19%, hasta llegar al 100% con 36 años y 6 meses cotizados.
En la siguiente tabla se muestran algunos ejemplos del porcentaje aplicado sobre la base reguladora según los años cotizados:
| Años cotizados | Porcentaje de la base reguladora |
|---|---|
| 15 | 50% |
| 20 | 62,38% |
| 25 | 73,78% |
| 30 | 85,18% |
| 36,5 | 100% |
La idea es sencilla: cuanto más se cotiza, mayor porcentaje se aplica y más alta es la pensión. Aunque hoy estés lejos de los 15 años, interesa seguir sumando cotizaciones siempre que sea posible.
Cuantías mínimas de las pensiones contributivas y no contributivas en 2025 como referencia
Las cuantías de 2025 permiten hacerse una idea de los ingresos de jubilación. Ese año las pensiones contributivas suben un 2,8%, las mínimas un 6% y las no contributivas y el ingreso mínimo vital un 9%.
Como referencia, la pensión mínima contributiva de jubilación para mayores de 65 años es de 12.241,60 euros anuales sin cónyuge a cargo y de 15.786,40 euros con cónyuge a cargo. Las pensiones no contributivas alcanzan 7.905,80 euros al año, 564,70 euros al mes en 14 pagas.
La prestación no contributiva por hijo a cargo mayor de 18 años con discapacidad superior al 65% asciende a 5.805,6 euros y llega a 8.707,20 euros cuando la discapacidad es igual o superior al 75%. No está de más coger papel y boli y comparar estas cifras con la propia vida laboral.
En definitiva, no llegar a los 15 años supone moverse en el terreno de las pensiones no contributivas, mientras que superar ese mínimo abre la puerta a pensiones contributivas más altas. Si aún estás lejos, conviene revisar tu historial y valorar cómo seguir cotizando para mejorar tu pensión futura, ¿de verdad te compensa quedarte justo por debajo del mínimo? Permanece informado de más asuntos relacionados con pensiones en nuestra sección de prestaciones.