Cobrar el paro o jubilarse a los 64 tras un despido: ¿qué opción trae más cuenta?

Los trabajadores despedidos a los 64 años pueden optar por el paro del SEPE o por la jubilación anticipada, voluntaria o involuntaria. La clave estará en los años cotizados y en los coeficientes reductores que aplicará la Seguridad Social a la pensión resultante.

Requisitos y penalizaciones para acceder a la jubilación anticipada involuntaria

Para la modalidad involuntaria se exigen 33 años de cotización y que el cese responda a causas como ERE, fuerza mayor o impago de salarios. ¿Te ves reflejado en alguna? Antes de firmar la solicitud, conviene repasar las penalizaciones:

Años cotizadosPenalización 30 meses (64 años si ordinaria 66 y 6)Penalización 12 meses (64 años si ordinaria 65)
 < 38 a 6 m18,8 %5,5 %
38‑41 a 6 m5,25 %
41‑44 a 6 m5 %
≥ 44 a 6 m4,75 %

Un recorte del 4,75 % sobre 2.000 € deja la pensión en 1.905 €: haz tus cuentas antes de dar el paso. Además, si te jubilas por decisión propia necesitas 35 años cotizados y que la pensión proyectada supere la mínima. La antelación máxima es de 24 meses y los coeficientes son más duros que en la involuntaria, llegando al 21 % con menos de 38 años y medio de aportaciones.

Ventajas de extender el paro antes de dar el salto a la pensión

Quizá prefieras cobrar la prestación contributiva mientras buscas trabajo o te formas. Recuerda que:

  • Cotizas por la base reguladora del paro, manteniendo derechos futuros.
  • Si agotas la prestación, puedes enlazar con el subsidio para mayores de 52 años, que cotiza por el 125 % de la base mínima (1.726,50 € en 2025).
  • El tiempo en desempleo computa para alcanzar los 38 años y 3 meses que permiten jubilarse a los 65 sin penalización.

¿Compensa esperar un año más para evitar los coeficientes? Esa suele ser la gran pregunta.

Pistas para decidir entre paro o jubilación según tu cotización

Sigue estas recomendaciones para saber elegir entre cobrar la prestación por desempleo u optar, en caso contrario, por la jubilación anticipada:

  1. Suma todas tus cotizaciones y comprueba si llegarás a los 65 sin recortes.
  2. Calcula la pensión estimada con y sin coeficientes; la simulación de Tu Seguridad Social resulta muy útil.
  3. Valora tu salud y tu capacidad de recolocación: a veces la tranquilidad pesa más que la nómina.
  4. Ojo con los plazos: la solicitud de jubilación debe presentarse dentro de los tres meses previos o posteriores al hecho causante.

Por tanto, si te faltan pocos meses para la edad ordinaria y el paro mantiene una cotización decente, suele salir más a cuenta apurar la prestación. No obstante, cada caso es un mundo y conviene contrastar cifras. Decidir entre seguir cotizando con el paro o jubilarse anticipadamente a los 64 pasa por comparar el importe neto de ambas vías, los requisitos cumplidos y el horizonte laboral real. Antes de firmar, solicita cita en el SEPE y la Seguridad Social para despejar dudas y reú­ne la documentación necesaria.